Cultura otaku
¿Puede un millonario encargar una serie de anime?
Anuncios
El conocido guionista Makoto Uezuresponsable de series de éxito como “Ansatsu Kyoushitsu“,“¡Akame ga Kill!" y "KonoSuba: ¡La bendición de Dios en este maravilloso mundo!“, respondió recientemente a una pregunta interesante en Twitter. Un usuario Le pregunté cuánto costaría producir un anime de una temporada. Si un millonario sin herederos al borde de la muerte le preguntara.
Uezu respondió: «Aproximadamente 300 millones de yenes (unos 2,8 millones de dólares). Sin embargo, incluso si una persona tuviera esa cantidad de dinero, las productoras no suelen tener disponibilidad inmediata y, en muchos casos, prefieren trabajar con clientes de confianza.." Además, indicó que “Si se busca alta calidad, tanto el presupuesto como el tiempo requerido aumentarían significativamente.."

Esta respuesta generó una serie de comentarios y debates entre los fanáticos:
- «Parece que 300 millones de yenes ya no son suficientes para encargar una animación a una empresa decente.».
- «Recuerdo que se hizo una serie de 4 cursos (unos 50 episodios) por 500 millones de yenes.».
- «Si sólo la producción cuesta 300 millones, me pregunto cuánto más costará en publicidad, gestión de licencias y otros gastos administrativos.».
- «Pensar que incluso un anime mediocre cuesta tanto me hace valorar más el esfuerzo que hay detrás de él.».
- «Escuché que un episodio de calidad promedio cuesta alrededor de 30 millones de yenes, pero con la alta resolución de hoy, los precios deben haber subido.».
- «Recuerdo que 'Jashin-chan' recaudó fondos para su producción a través de crowdfunding, con un coste de 30 millones de yenes por episodio.».
La revelación de Uezu no solo arroja luz sobre el alto costo de producir un anime, sino también desafíos adicionales como la disponibilidad de estudios y la preferencia por clientes confiables. El mundo de la producción de anime sigue siendo un ámbito caro y competitivo, con precios que pueden variar significativamente dependiendo de la calidad y los recursos disponibles.
Fuente: ¡Yaraon!